El contexto no es un elemento pasivo, de referencia, como a veces se piensa. En cambio, es un elemento muy activo que influye y transforma todo lo que abarca. Un árbol idéntico a otro, será diferente puesto a la orilla de uaa calle que en bosque.
En el lenguaje que usamos todos los días, contextualizar es una palabra que escuchamos o decimos con frecuencia. La pregunta si la empleamos correctamente.
Este segundo apunte está enfocado a la práctica de contextualizar, tomando en cuenta los temas tratados en el apunte anterior. Para ello, se propondrán criterios, así como algunos desaprendedores y aprendedores, ara facilitar la práctica de esta herramienta de gran importancia. Concluiremos proponiéndote un segundo proyecto para mejorar en tu capacidad de contextualizar.